Gemistos Pletón o la invención del Renacimiento en Florencia
Imagen: «Retórica» (1565), detalle del grabado de Cornelis Cort después de Frans Floris.
Uno de los personajes más decisivos para la configuración del neoplatinismo renacentista en Europa a través de Florencia lo representó la figura y el magisterio del filósofo Giorgos Gemistos, conocido como “Pletón”, teólogo cristiano, heterodoxo, que se alejó de los aledaños del poder bizantino y refundó en Mystra (Peloponeso), al pie del monte Taigeto, la Academia Platónica.
Con ocasión del Concilio de Florencia (1439), fue llamado por el Patriarca y el emperador para encabezar le legación ortodoxa y dirigir las discusiones sobre el espinoso tema teológico del Filioque. De todo ello da cuenta el fresco de Gozzoli, que hoy preside la capilla privada del Palazzo Medici en Florencia. Al hilo de sus imágenes, el doctor García Galiano repasa la biografía del filósofo griego, su encuentro fundamental con Cosme de Médicis (“tras conocerlo, me hice platónico”, confiesa el Padre de la Patria, en una epístola a Marsilio Ficino) y la instauración de la Academia Platónica en la Villa dei Careggi, que significó el encuentro fecundo de occidente con el neoplatonismo griego, con las consecuencias en el arte, la arquitectura, la filosofía y la literatura de todos conocidas.
Ángel García Galiano es Licenciado y doctor en Filología Hispánica por la Universidad Complutense, ha sido discípulo de Fernando Lázaro Carreter, y bajo su dirección realizó su Tesis Doctoral: «Teoría de la imitación poética en el Renacimiento», publicada por la Universidad Complutense (Madrid, 1988). Ha sido Lector de Español en la Universidad de Padua (Italia), profesor- investigador de la Complutense en Madrid y profesor de Teoría y Crítica Literaria en la Universidad de Deusto (Bilbao).
En 1981 quedó finalista del I Premio de Poesía Dámaso Alonso con el poemario «Oculto mensajero», y más tarde finalista con «Estampa de Tierra Santa» en el Ateneo Casablanca, Premio de Poesía Juan Bernier, libro que publicó la Editorial Andrómeda con el título «Tierra prometida» en 1988. En 1987 fue Mención de Honor en el IX Premio Aller de Cuentos. Junto a esta labor docente y creativa publica artículos de teoría y crítica literaria en revistas especializadas.
